La transformación de Yerba Buena avanza a pasos acelerados. A pesar de la pandemia, el municipio comandado por Mariano Campero no detuvo su marcha. Por el contrario, los cambios se percibieron en distintas áreas de la gestión.
“Cada peso que ingresa a las arcas del municipio se destina a obras y servicios públicos”, suele repetir el intendente Mariano Campero para explicar el fenómeno de la ciudad.
Actualmente, Yerba Buena avanza con la creación del Centro de Monitoreo de la ciudad, que estará terminado en los próximos meses. Es uno de los desafíos para este año para ayudar a prevenir los delitos y mejorar la seguridad de la ciudad. Pero no es la única medida para prevenir el delito. Está abierta la inscripción para incorporar 40 nuevos Guardias Urbanos, que se sumarán a los más de 80 que hay en funciones actualmente.
La educación fue otra de las áreas clave. Yerba Buena decidió poner énfasis en la gestión educativa. Los alumnos de las escuelas de gestión estatal pueden rendir un examen de inglés, el Trinity, cuya matrícula en dólares es solventada por el municipio. Esta semana presentó el inicio de las clases de la Tecnicatura en Desarrollo de Software. “Estamos apostando a la industria del conocimiento. Tenemos convenios con empresas de software de Tucumán que necesitan recursos humanos así que desde el municipio los estamos capacitando y son sueldos superiores a la media”, comentó la directora de Educación, Victoria Desjardins.
La pandemia también puso a prueba el sistema de salud municipal y muchos vecinos celebraron y agradecieron la calidad de la atención. Desde la explosión de casos de coronavirus, el Centro Asistencial Ramón Carrillo fue el primero en implementar el servicio de telemedicina para hacer seguimiento de los pacientes contagiados de covid-19 pero también para atender otras patologías y evitar la aglomeración de personas en el centro asistencial. La última gran incorporación fue el equipamiento para hacer radiografías digitales, para no utilizar más las placas. El diagnóstico por imágenes ahora se hace mediante correo electrónico o whatsapp y se envía a los pacientes y a los profesionales que solicitan ese estudio.
Otra área donde se volcaron los recursos es en iluminación y en obra pública, muchas de ellas realizadas con personal municipal. En estos momentos se están pavimentando y bacheando las calles de la zona sur de la ciudad, quizá la más postergada. Estas obras incluyen la infraestructura para evitar inundaciones y anegamientos en la zona baja de Yerba Buena. El Municipio ya va interviniendo en más de 50 cuadras en esta parte del año y prevé superar las 100 cuadras intervenidas hasta fin de año.
Dentro el mega plan de obra pública impulsado por la gestión de Mariano Campero, la revalorización de los espacios públicos fue determinante. “En la post pandemia la gente va a recurrir a los espacios públicos al aire libre y por eso pusimos el énfasis en mejorar las plazas de la ciudad. Será el lugar de encuentro de las familias y los amigos”, sostuvo Campero cuando anunció el inicio de estas obras.
El mejoramiento del tránsito es otra de las áreas que forman parte de la transformación de la ciudad. Nuevos semáforos, mejoramiento de la circulación en distintas arterias, carteles nomencladores forman parte de los trabajos realizados para mejorar el tránsito en la ciudad.
Además se hizo la renovación de iluminarias led en distintos puntos de la ciudad. El objetivo es llegar a fin de año con el 50 por ciento de la ciudad con esta tecnología y tener el 100 por ciento de Yerba Buena con iluminación led para 2023. La iluminación es clave además para prevenir el delito.
